http://www.sustainablecitiescollective.com/sebastien-miller/1251334/time-take-urban-out-urban-design
Desde hace algún tiempo he tenido un problema tanto con el término y la definición de “diseño urbano”. ¿Qué es exactamente? Compararlo con la arquitectura o la planificación, que son profesiones que son fáciles de definir e identificar, incluso a la mente de un niño. En su nivel más simple, los arquitectos diseñan edificios, mientras que los planificadores diseñan ciudades . Entendemos esos papeles porque tienen límites y acciones que les dan una identidad clara. Pero no es así para el diseño urbano.
Todos podemos identificar un espacio bien diseñado cuando lo vemos, pero que parte de esto se debe a buen diseño contemporáneo? Derivó este de políticas de planificación sólidas que alentaron una vibrante mezcla de usos? Fue debido a la participación activa de grupos de la comunidad? Para la mayoría de los proyectos, es probable que sea de todo lo anterior … y algo más. Lo que entendemos como diseño urbano implica un amplio espectro de disciplinas, tales como arquitectos paisajistas, planificadores, arquitectos, ingenieros, etc. Además, existe la participación del público, agencias gubernamentales, y los desarrolladores. Es claramente un “esfuerzo de equipo” para producir buenas intervenciones de diseño urbano.
Hay una denominación errónea sobre el diseño urbano como si estuviera limitado a entornos urbanos o esquemas suburbanos. Sin embargo, los principios de diseño urbano pueden y deben operar en entornos rurales o naturales. A medida que nos esforzamos por tener ciudades sostenibles y miramos a cuestiones tales como la preservación de espacios verdes, producción de alimentos, mitigación de inundaciones, es obvio que no hay exclusividad urbana o límite definido en el proceso de diseño urbano. Todo está conectado.
Exactamente lo que se entiende por estos cuatro términos clave se explican de la siguiente manera. Estos términos deben aplicarse a cualquier proyecto, por cualquier disciplina, a cualquier escala o ajuste:
- La Connectividad: Los diseños deben ofrecer una clara jerarquía de rutas y permeabilidad siendo el viaje activo el foco de cualquier esquema. En orden de prioridad, peatones, ciclistas, transporte público y vehiculos de acceso necesitan ser atendidos. Las relaciones entre edificios, espacios y naturaleza necesitan ser considerados. La conectividad también puede incluir cobertura digital, lo que mejora el acceso a servicios e información.
- El Atractivo: Tanto el destino y el viaje deben atraer a la gente, invitándoles a participar involucrarse con el sitio y entre ellos. Aspectos del diseño que apoyan esto incluyen confort, seguridad, estética, y descubrimiento. Identidad local , el patrimonio heredado y valores también contribuyen a hacer lugar (placemaking).
- La Sostenibilidad: Esto incluye protección del hábitat, administración de recursos, eficiencia energética y diseños que responden al clima. En términos económicos, los proyectos deben ser considerados en términos de viabilidad y equidad. Siempre que sea posible el proyecto debe ser visto como inversiones a largo plazo, generar oportunidades de financiación y proporcionar un retorno a las comunidades locales. En lo social, los diseños deben mejorar la calidad de vida de todos los individuos y grupos, independientemente de edad, capacidad, origen étnico, así como la condición social o de clase. Siempre que sea posible, se debe ofrecer oportunidades de asociación, participación y empoderamiento.
- La Funcionalidad: El agregado de diversos usos, experiencias, propiedades y actores interesadas. Los diseños deben ofrecen una superposición de actividades y programas integrados, ser adaptables en uso y resilientes a cambios futuros.
No hay nada nuevo en lo que se presenta en estas descripciones. Las teorías y las prácticas han estado en circulación desde hace muchos años, todas los cuales son utilizadas regularmente por los profesionales y académicos de todo el mundo. Sin embargo, el diseño urbano no debe restringirse a cualquiera tipo de proyecto de gentrificación, esquema de mejora vial, diseño de parques, sendero de bosque, esquema de drenaje de aguas pluviales, o urbanización habitacional. Exige que todos los diseñadores dentro del ámbito edificado operen de una manera más amplia y tomen en cuenta los principios de diseño holístico. David Adams y Steve Tiesdell resumen esto en su libro ‘Shaping Places’, donde señalan que existe una responsabilidad en los diseñadores urbanos para persuadir y educar a otras disciplinas de los impactos que las decisiones individuales tienen sobre la calidad urbana.
Si es asumida por la industria, una terminología uniforme, tal como yo propongo sería aplicable por igual a los diseñadores, ingenieros, hecedores de políticas, desarrolladores y municipios para dar una idea más clara de lo que todos estamos tratando de lograr. A medida que el desarrollo continúa a tasas y densidades cada vez mayores , es hora de que rompamos las fronteras profesionales que no nos permiten crear y gestionar los lugares mas éxitósos posibles.